Hoy estamos ante una de las películas coreanas más laureadas del 2012 que, con la demora de rigor, por fin se distribuye en occidente. Dirigida por el novel pero hábil Yun Jong-Bin, y protagoniza por el mismísimo Choi Min-Sik (Veterano de Oldboy, Encontré al diablo…etc.), la película se esmera en tratar la temática del crimen y la corrupción desde un prisma un tanto peculiar, y desde luego que lo consigue…
Nuestro protagonista es Choi Hyung-bae. Un inspector de aduanas cuya corrupción solo es igualada por su alcoholismo y su torpeza. Tras una serie de problemas en su puesto de trabajo, Hyung-Bae decide cambiar de negocio por algo más lucrativo y convertirse en gangster a tiempo completo. Cosa que no le costará demasiado ya que, casualidades de la vida, tiene contactos familiares en el mundo del hampa.
No hay mucho que comentar del apartado técnico. Presenta los rasgos de calidad y solidez que ya son divisa del cine coreano, sin destacar particularmente en la narrativa visual, pero mostrando un estilo resuelto y eficaz.El montaje no termina de beneficiar a la película… para empezar el trailer comete el error de venderla como una cinta de acción , pero las únicas escenas de acción de la película son las de los trailers propiamente dicho. Así pues el ritmo que se consigue es insuficiente, muy necesitado de acento narrativo.
Así pues, en vez de en la acción o el drama, la película se centra mas en los personajes y sus relaciones desde una perspectiva puramente descriptiva e incluso costumbrista, con un leve componente de intriga entre facciones que aporta algo de interés pero no termina de arrancar. Por último, también juega con ciertos elementos sórdidos que introducen una nota de humor. Choi Min-sik se demuestra una vez más como un actor polifacético y de gran habilidad.
De momento iría para el 7, pero la película comete errores que afectan a su apreciación. Errores lógicos: ¿por qué el protagonista se sabe todo su árbol familiar desde el big bang hasta nuestros días? ¿Por qué los gangsters parecen no haber visto una pistola en su vida? Si, ambos (la importancia del clan familiar y la preferencia por armas marciales) son rasgos idiosincrásicos de la cultura coreana, pero en esta película los llevan a extremos ridículos. Otro error es el protagonista: es un cansino, un pelmazo de campeonato, y encima bien interpretado. Todo ello hace que no podamos evitar echar una miradita al reloj de vez en cuando…
Conclusión:
Aunque original y técnicamente bien ejecutada la propuesta de hoy se percibe como demasiado insípida. La misma consistencia que te engancha desde el primer minuto no es suficiente para mantenerte atento durante toda su extensión, sobre todo si obran en su contra un protagonista odioso y un guión que se rinde a la incongruencia ocasional. Si eres paciente y te gusta este tipo de cine sin duda sabrás apreciarla, si no puede que se te haga un poco larga.